¿Se puede hacer peor? Y la gente aún le aplaude… resulta increíble.
Lo has hecho fatal. Dicen que te vas y que ya has recogido tus cosas del despacho. Hoy es tu día. Día de balance y reflexión. Hoy te vamos a tutear. Esta noche, cuando llegues a casa y mires atrás, quizás te sobrecojas. Es la soledad de quien se creyó mesías y ya no es nada.
Fuente: Adéu, Artur!